miércoles, 18 de julio de 2012

Los escritores de álbumes ilustrados


Escritores de álbumes ilustrados: una especie que crece

Empiezo este artículo dando las gracias a Ana Garralón por haberme invitado a participar en este debate y sobre todo por haber logrado con su texto   (http://anatarambana.blogspot.com.es/2012/07/urgente-se-buscan-escritores-de.html) avivar un tema que me interesa mucho, los escritores de álbumes  ilustrados y de libros para primeros lectores.

Consideraciones previas

 En estos momentos del devenir de la literatura infantil española hay una serie de aspectos que tenemos que considerar para situar el tema:
            -La edición de álbumes o libros para primeros lectores es muy abundante, en muchos momentos excesiva, la mayor que hemos vivido en las últimas cuatro décadas (8,9% de crecimiento de la LIJ en 2010). Como consecuencia de ello las tiradas se han reducido y son pequeñas (de 1500 a 3000 ejemplares), la rotación de novedades es muy grande, la vida de los libros es corta y en la mayoría de las ocasiones las obras pasan inadvertidas para la prensa especializada (revistas y blogs) y lo peor, en ocasiones son de difícil acceso para los lectores. 
            -El número de sellos editoriales sigue creciendo pese a la situación económica reinante. Además de las dudas que esto genera sobre su viabilidad, se abre un amplio abanico de posibilidades para  los creadores y los lectores debido a la riqueza de líneas creativas y estéticas que se nos ofrecen.

            -El número de obras de creación propia ha aumentado considerablemente, pero no debemos olvidar que todavía los títulos procedentes de la compra de derechos de otros países sigue teniendo un peso principal en el conjunto de la edición española. Es bueno recordar que en la mitad de los noventa los álbumes de creación propia se contaban con los dedos de una mano y eran únicamente los ganadores de los premios que había en aquellos momentos: Internacional de Ilustración de la Fundación Santa María, Apel-les Mestres y A la orilla del viento. La aparición de pequeñas editoriales ha propiciado este aumento de los libros creados en nuestro país y eso es muy bueno para que los jóvenes lectores puedan acercarse a obras que ponen en valor nuestra cultura.
          -El sector de la literatura infantil tiene un peso creciente en el volumen del negocio editorial (12,1 %  de facturación en el 2010)
-La presencia de la LIJ  en la información cultural de los medios de comunicación sigue siendo casi imperceptible. Sólo algunos acontecimientos (ferias, premios y noticias  de estadísticas lectoras)  encuentran espacio en los mismos. Las secciones  de literatura infantil son muy escasas en la prensa nacional y algo más abundante en la regional, y lo mismo sucede con los espacios radiofónicos y televisivos. 
        -La venta de derechos de los libros creados en España ha crecido en la última década,  consecuencia lógica de la mayor preocupación editorial por divulgar sus libros.
             
Álbumes ilustrados

En este contexto viven los libros para los primeros lectores, y dentro de ellos el álbum ilustrado es el buque insignia de los mismos y en él me centraré (aunque también es un género que trasciende edades, pero ese es tema para otro momento) No quiero, ni mucho menos, despreciar los libros de colección para primeros lectores, ellos también son importantes y algunos escritores han obtenido el Premio Nacional de Literatura Infantil con libros de colección como Joles Sennell, en 1988, con el texto La rosa de San Jorge o Vicente Muñoz Puelles, en 1999, con Óscar y el león de correos
El álbum es la conjunción del trabajo del escritor y del ilustrador. El álbum ilustrado es la mayor aportación que ha hecho la LIJ a la LITERATURA y si algo tiene es diversidad: el álbum es un género diverso en contenidos temáticos, estéticos y formales. Tiene diversidad temática: álbumes se pueden hacer con textos poéticos, descriptivos, a modo de catálogo, de juegos y textos narrativos. El álbum tiene diversidad de estilos en las ilustraciones que lo conforman, desde el más realista Roberto Innocenti al más abstracto de Leo Lionni o Kveta Pacovska. El álbum ilustrado tiene una gran variedad formal: distintos tamaños, texturas, papeles, troqueles, desplegables…
El álbum ilustrado es la simbiosis perfecta entre el libro de literatura y el libro de arte.

Los creadores de álbumes

Los creadores de los álbumes son los escritores y los ilustradores o viceversa y cada uno desempeña un papel primordial; aunque los editores también son imprescindibles en este proceso, pero en este artículo no voy a hablar de su función para no abandonar el tema.

  
Ilustradores
Los ilustradores españoles continúan con una gran salud creativa y de reconocimiento internacional a través de premios y sobre todo de encargos editoriales, como sucede con Tàssies, Pablo Auladell, Pep Montserrat, Carmen Segovia o Javier Zabala. Los ilustradores siguen trabajando para el extranjero, ilustran libros para otros sellos editoriales, como ya venían haciendo, desde los años 80 y 90,  Carme Solé, Ulises Wensell, Alfonso Ruano, Emilio Urberuaga, Arcadio Lobato o Gusti. Hacen álbumes para editoriales francesas, suizas, italianas, taiwaneses… con textos de escritores franceses, suizos, italianos o taiwaneses. 
Los escritores 
Escribir textos para álbumes ilustrados en España es una labor que empieza a producirse de manera continuada a lo largo de este siglo. No quiero decir con  esto  que antes no hubiera escritores que hicieran algunos textos para álbumes, no, solo que dada la escasez de libros de producción propia que se editaban, no se pueden denominar como escritores de álbumes. Destacaron las obras de  J. Manuel Gisbert, Ricardo Alcántara o María de la Luz Uribe, además de algunos ilustradores que escribían sus textos como Asun Balzola. Ellos y otros muchos ayudaron a que los álbumes españoles tuvieran una presencia inicial  destacable, si bien el gran número de traducciones ocupaba la mayor parte del panorama editorial de álbum.


     
   
                                                                         
A finales de los años noventa y sobre todo con el inicio del nuevo siglo empezaron a surgir escritores que dedicaban su labor creativa al álbum ilustrado como una parte importante de su trabajo literario. 
En la actualidad, los primeros lectores leen textos que  tienen una variada procedencia: el cuento tradicional,  los cuentos de escritores clásicos, los escritores esporádicos, y los escritores de álbumes, que los hay.
-Los cuentos tradicionales siguen siendo una fuente en la que beben muchos editores a la hora de crear libros para primeros lectores. Este fenómeno perdura a lo largo de la historia de la LIJ española moderna, desde  los Cuentos Populares de editorial La Galera en las dos épocas (años 80 y 90), a los Cuentos de la Media Lunita de Editorial Algaida/Anaya. Hoy en día, son de todos conocidas las versiones que las diferentes editoriales publican con mayor o menor éxito. Incluso ha surgido algún premio que condiciona la historia a ser una versión de un cuento popular o de un clásico. Es evidente que en esta decisión editorial se pueden encontrar motivaciones económicas,  comodidad, utlidad, oportunidad, interés, o no apostar por los textos actuales, todas respetables.
-Los cuentos de autores  clásicos como Cortázar, Pessoa, Verne, Tolstoi, Wilde o Gorki siguen la estela de los cuentos populares. Algunos están destinados a primeros lectores y otros a lectores de mayor edad.  Hay diversos ejemplos como la Colección El cordel de El Zorro Rojo,  El bosque viejo de Editorial Gadir o los libros de Editorial Nórdica.
-Los escritores esporádicos en el mundo del álbum ilustrado son muy frecuentes por muchas razones: porque piensen que un texto para álbum se escribe con suma facilidad, porque si escriben para adultos cómo no van a escribir para niños y algunos en media hora, porque son escritores de libros infantiles y les apetece probar con los más pequeños, porque los álbumes están de moda, porque reciben el encargo de algún editor, porque han tenido un hijo y entonces se sienten atraídos, porque trabajan con niños (maestros, bibliotecarios, narradores) y quieren contar historias… Cada uno tiene sus motivaciones que sólo él sabe y sobre las que no puedo opinar, ni juzgar. Lo que sí es cierto es que estos escritores tienen caducidad, duran un tiempo, unos libros, una editorial…son flor de un día, o día y medio.
-Y por último están los escritores de álbumes. A pesar de la competencia que crea la compra de derechos, los cuentos populares, los escritores clásicos, los escritores de adultos y los escritores esporádicos, considero que hay un grupo de escritores de álbumes y por extensión de primeros lectores que está creciendo. A ellos va dedicado el siguiente apartado.

Los escritores de álbumes


                 

Los escritores de álbumes tienen una serie de características que los define y atesoran un conjunto de cualidades que se aprecian en los libros que escriben:
1-Los escritores de álbumes llevan uno o varios años publicando libros.
2-Los escritores de álbumes tienen editados un número de álbumes o libros de primeros lectores que va desde uno a cien.
3.-Los escritores de álbumes tienen sus obras diseminadas por un amplio número de editoriales nacionales e internacionales, o la tienen  concentrada en un número más reducido debido a la afinidad que han encontrado con algunos editores.

            

4-Los escritores de álbumes escriben textos que conectan con los sentimientos de los niños, con la vida cotidiana de los niños, con el sentido poético de los niños, con el humor de los niños, con el imaginario tradicional de los niños o con los problemas de los niños.
5-Los escritores de álbumes crean mundos fantásticos, mundos cercanos, mundos ignotos, mundos olvidados, mundos divertidos, mundos oníricos, mundos imposibles, mundos reales y mundos delicados que atrapan a los niños que leen sus libros.
6-Los escritores de álbumes inventan personajes creíbles, identificables, valientes, llenos de miedos, personajes fuertes, personajes débiles, personajes que crecen, personajes que no se rinden, personajes de fantasía, personajes de carne y hueso con los que se identifican los lectores de sus libros.
7.-Los escritores de álbumes  escriben libros con diversidad de lecturas, que abren a los lectores otras ventanas literarias, mitológicas, léxicas, artísticas, gastronómicas o científicas con las que  engrandecen las sucesivas lecturas.


           

8.-Los escritores de álbumes tienen un gusto especial para buscar ilustradores que enriquezcan sus textos. Algunos de los escritores de álbumes buscan ilustradores, otros los encuentran a través de los editores. Aunque tengo que decir en este punto que hay variedad y por tanto los resultados de los libros son dispares (pero este tema no es el  objeto de  análisis y lo dejo para otro momento)
9.-Los escritores de álbumes tienen un gran número de obras que atesoran estas cualidades y una gran parte de ellas tiene la etiqueta de libros con calidad. Desde Vargas Llosa a García Márquez pasando por Delibes, todos y cada uno de los maestros de las letras tienen obras de menor calado o más imperfectas, lo mismo les sucede  a los escritores de álbumes.
10.-Pero por encima de todas estas consideraciones, hay una que se me ha descubierto en el último tiempo como impresicndible y díría que única: los escritores de álbumes ilustrados son aquellos escritores y escritoras que se sienten creadores de álbumes. Personas que respetan el género y quieren aportar sus historias, consideran valiosos este tipo de obras y dedican sus esfuerzos, su tiempo y sus energías a crear estos libros.

Con estas palabras quiero reivindicar el trabajo de estos escritores/as que hacen buenos libros y están creando un mundo literario personal, coherente y atractivo. 
No soy yo quién para calificar, clasificar o dar título de autor a nadie y menos para excluir a todos los que ayudan con sus libros a enriquecer el género. 






Me disculpo ante aquellos que se sintieron molestos por no figurar en la relación que di cuando escribí este artículo. No estaba en mi ánimo ofender a madie, solo quería demostrar que sí había y hay escritores de álbumes ilustrados.

Javier Sobrino (amante de álbumes ilustrados)
 http://sobrinojavier.blogspot.com         

5 comentarios:

Pep Bruno dijo...

Javier, muchas gracias por tu artículo. Me ha interesado mucho, me ha dado alimento para pensar (y me he sentido muy halagado, la verdad), pero pienso que en ese listado que haces de autores faltan un buen puñado de nombres. Por ponerte un ejemplo: Marisa Núñez, autora de La cebra Camila y un montón de álbumes imprescindibles (firmados con su nombre o con seudónimos).
Un abrazo y gracias por avivar el debate

Iban Barrenetxea dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Iban Barrenetxea dijo...

Estimado Javier, con todos mis respetos, no estoy de acuerdo con esos "requisitos". Un escritor de álbumes ilustrados es simplemente un escritor que crea utilizando esa "forma". Un escritor que tiene cosas que decir y opta por decirlas en ese medio que combina imagen y texto de esa forma determinada. Y ya está. Así de simple.

Uno puede ser un buen o un mal escritor de álbumes, ése es otro asunto. Pero el tiempo que alguien lleve publicando, la cantidad de libros que haya publicado, el prestigio internacional, etc... no pienso que sean "factores definitorios". Es como afirmar que un compositor que ha creado una sinfonía es menos compositor que alguien que ha escrito diez.

La cantidad tampoco es una garantía de calidad. No creo que la calidad literaria deba cuantificarse "a peso". Lo importante no es colgarse una banda como las misses en la que ponga "SOY ESCRITOR DE ÁLBUMES ILUSTRADOS" (y que en la parte de atrás ponga "y tú no") ni de ganar el premio nacional. Tampoco se trata de escribir porque está de moda, porque es "fácil" o para que los demás nos consideren "autores". Se trata únicamente—o al menos creo que debe tratarse— de crear porque uno tiene esa necesidad de hacerlo, ese impulso de tener algo que decir y hacerlo porque de lo contrario nos reventaría una vena.

Tal como dice Pep, se me ocurren muchísimos nombres que merecen estar en esa lista (Javier ha firmado el artículo como "escritor de álbumes" así que ya se ha añadido, lo cual me parece estupendo). Pero no lo voy a hacer porque son tantos que siempre quedarían nombres de amigos y amigas injustamente excluídos.

Ojo, no me quedaría tranquilo sin puntualizar que no hablo de mí mismo, ya que yo he escrito y publicado dos "libros ilustrados" con elementos de álbum pero aún no he escrito nada en el campo del álbum, que es una "forma" totalmente diferente. Simplemente esta es mi opinión.

Abrazos

Estrella Escriña dijo...

Muy interesante, Javier. Me parece que la polémica despertada por Ana está muy viva y que hay mucho tema que analizar.

Creo notar un cierto acuerdo en todos los comentarios sobre que el álbum es un género muy particular con sus propias características que está cambiando la forma de entender la lectura. Pero el tema de si el escritor de álbumes tiene una particularidad especial me parece más controvertido. ¿Para cuándo un libro de Peonza para analizarlo?

Gracias

Javier Sobrino dijo...

Gracias a los que habéis leído el artículo y los que habéis hecho comentarios.
Como sabéis este artículo surgió con la idea de reivindicar la existencia de escritores de LIJ y dentro de ella, de escritores de primeros lectores y como el álbum es el referente de los primeros lectores, se derivó a los escritores de álbumes.
Estoy de acuerdo en que los requisitos pueden ser "artificiales", pero buscaba indicadores objetivos para afirmar que sí hay escritores de álbumes, primeros lectores y de LIJ en general. Estoy de acuerdo en que lo importante no es tener cuatro, dos o cincuenta álbumes, pero un número amplio da razones objetivas para afirmar que ese autor tiene un trabajo detrás contrastado en el tiempo. Eso es todo. Yo no pretendo dar carnets de "escritores de álbumes", para nada. Uno es algo en la medida que se sienta así, por lo tanto hay tantos escritores de álbumes, de cómics, de novelas, de poesía... como personas que sientan que lo son, eso es lo importante desde mi punto de vista.
En relación con los escritores que he citado, pues es mi lista, y cada uno tiene la suya creada con sus criterios, todos válidos, como los míos, llenos de subjetividad, como todo lo que hacemos.
Lo importante es que antes no había escritores y ahora ya debatimos una relación de ellos, me quedo contento porque en realidad, muchos pensamos que sí los hay.
Gracias y abrazos.